La cooperación integral tiene como finalidad la creación de redes de trabajo que facilite el intercambio horizontal de saberes, conocimientos y experiencias entre los diferentes agentes institucionales y de la sociedad civil, que trabajan en el diseño e implementación de políticas para el desarrollo local, tanto en el ámbito rural como urbano. De esta manera, se busca el fortalecimiento de la capacidad institucional y operativa de autoridades locales y sociedad civil en la definición y construcción de políticas públicas que pongan en el centro la reproducción de la vida.
La cooperación descentralizada se ha venido desarrollando de manera propia gracias a experiencias concretas de colaboración directa entre entidades locales europeas, y de manera particular españolas, con las de otros países latinoamericanos, los comúnmente llamados hermanamientos. Esta forma de cooperación ha favorecido un diálogo horizontal entre las instituciones y ha demostrado que los gobiernos locales pueden ejercer un liderazgo activo e incluyente, capaz de impulsar las alianzas necesarias para mejorar la cohesión social y territorial en sus áreas de influencia.
Considerando los desafíos a los que se enfrentan las ciudades actualmente, INCIDEM quiere poner en valor esta forma de cooperación entre iguales y propone extender este camino, favoreciendo el establecimiento de relaciones entre ciudades pertenecientes a diversos países para que intercambien sus experiencias y conocimientos, y colaboren, junto a otras entidades públicas y privadas, en la realización de proyectos conjuntos para favorecer al desarrollo mutuo.
El trabajo en Red entre las ciudades constituye una oportunidad para generar procesos de innovación y aprendizaje, contando siempre con la colaboración de los diferentes actores del territorio: gobierno local, entidades sociales, ciudadanía, empresas y universidades, entre otros.